Considerado a nivel mundial como uno de los más grandes exponentes del box, Muhammad Ali no solo nos dejó un legado de enseñanzas sobre el mencionado deporte: sus lecciones pueden aplicarse perfectamente al entorno empresarial. El deportista estadounidense, a raíz de todas las pruebas por las que tuvo que atravesar en el trayecto de su vida, aprendió un sinfín de cosas. Hoy conocerá cinco de ellas.

1. ¿Cuáles son sus metas?

Defina, en primer lugar, a dónde quiere llegar qué es lo que realmente quiere para su empresa y en cuánto tiempo será una realidad. Además, es preciso que identifique de qué forma ha de lograr dichas metas y cuál es el primer paso. “Lo que me mantiene avanzando son mis metas” se repetía Ali constantemente.

2. El deseo como principal estrategia

A la par con sus metas, sus visiones a futuro en base a sus deseos son el camino ideal. Eso que piensa cuando cierra los ojos, aquello que imagina cuando escucha la palabra ‘éxito’; todo puede cumplirse si mantiene la perseverancia y trabaja por sus principales anhelos.

3. Sin sacrificio no hay victoria

“No se rinda, sufra ahora y viva el resto de su vida como un campeón”. En el camino pueden presentarse muchos obstáculos, el detalle está en superarlos con inteligencia y comunicación y siempre teniendo presente que cada paso dado es un peldaño más cerca del triunfo.

4. Ábrase a la posibilidad de un cambio

De la mano de los cambios está el crecimiento. “Un hombre de cincuenta años, que piensa igual que cuando tenía veinte, ha desperdiciado treinta años de su vida”.

5. Piensa positivamente

Considere que -con esfuerzo- ese propósito, ese negocio, podrá ser posible. Una mente que es consciente de lo que desea, es capaz de cumplir todos sus objetivos. “Una vez que la creencia se convierte en una convicción profunda, las cosas comienzan a suceder», recitaba la estrella.